Dance Marketing

Dance marketing, así es como es denominada esta original técnica publicitaria que busca sorprender al público y al consumidor con acciones animadas donde la música, la escenografía y el baile juegan un papel protagonista.

Su modalidad más extendida se basa en el despliege de coreografías y bailes improvisados en lugares o zonas comerciales con el objetivo de generar una experiencia cercana al consumidor y que transmita ciertos valores asociados a las marcas o empresas implicadas.

Aunque pueda parecer un concepto novedoso, este tipo de estrategias publicitarias viene siendo utilizado en muchos países del todo el mundo aunque su llegada a nuestro país ha aumentado su popularidad, adquiriendo cierta atención mediática por parte de muchos medios debido en gran parte a su peculiaridad y original puesta en escena. Algunos ejemplos de ello lo han sido, la última acción llevada a cabo por la compañía sueca IKEA con sus "bailarines camuflados" o la que recientemente fue desarrollada en varios establecimientos McDonald’s recurriendo al "Beatbox" como gancho principal del espéctaculo.

El "Dance Marketing" puede considerarse como la recreación de una escena musical animada de corta duración. De forma similar a lo que sucede con las estrategias y acciones de street marketing o field marketing donde podríamos englobar esta técnica, el Dance Marketing recurre al encuentro o el contacto con el consumidor para generar una experiencia única y cercana, añadiendo el "factor sorpresa" como ingrediente adicional.

La intensidad de estas acciones en muchas ocasiones puede inducir a la implicación y participación del los consumidores como parte de la propia experiencia, generando un estado de complicidad y anímico emocional positivo que son sin duda, una parte importante del objetivo de este tipo de acciones que también pretende difundir y transmitir determinados valores.

Sin duda una original técnica que convierte el "habitad comercial" en un verdadero escenario generando una experiencia positiva, alegre y divertida para el consumidor.


Fuente: www.businessperu.com.pe

Campañas gráficas contra el SIDA

Vende su espalda para poner publicidad

Una camiseta al día le ha servido a un estadounidense para evitar el desempleo y facturar unos 85.000 dólares al año, vendiendo el espacio publicitario en su torso.

Jason Sadler, de 26 años, un ex empleado en marketing de Florida, fundó su propia empresa Iwearyourshirt.com en el 2008, con la idea de ponerse una camiseta suministrada por cualquier empresa y luego usar los medios sociales para promocionarla.

Para este servicio de anuncio humano Sadler cobra el valor del día, por lo que el 1 de enero cuesta un dólar, mientras que el 31 de diciembre cuesta 365.

Sadler dijo que puede que no parezca mucho, pero que acaba sumando 66.795 dólares si vende todos los días, lo que ha conseguido este año. También vende patrocinios mensuales por 1.500 dólares, lo que añade otros 18.000 dólares más.

“Voy por ahí, saco fotos, llevo la camiseta todo el día (...) Blogueo estas fotos, las cuelgo en Twitter, cambio mi perfil en Facebook (...) y luego hago un video en Youtube “, contó a Reuters Television. “Este año he sacado unos 83.000 dólares, agregó.

El salario medio en Estados Unidos es de unos 615 dólares por semana, o unos 32.000 al año, según la Oficina de Estadísticas Laborales estadounidense.

Sadler ya ha empezado a rellenar su calendario del 2010 y, en un auténtico modo empresarial, está expandiendo sus servicios contratando a otra persona para que se ponga una camiseta cada día en la costa oeste de Estados Unidos y doblando el precio.


fuente: El Comercio Web.